El sueño es para mí el tercer gran pilar de la salud, junto con el entrenamiento y la alimentación, pero le solemos prestar menos atención.
¿Qué aporta el descanso tras un entrenamiento?
Sea cual sea tu objetivo, sabes que no vas a conseguirlo de un día para otro y que lleva tiempo ir cosechando resultados. Tanto si quieres marcar músculo, ganar fuerza o perder grasa, es importante que entrenes con la frecuencia necesaria y que respetes los descansos adecuados.
Cada vez que hacemos ejercicio, sometemos a nuestros músculos a un estrés que les hace activarse y trabajar. Sin embargo, hasta que no descansamos no empiezan a crecer o a ganar tono. Por otro lado, cada vez que entrenas tienes que progresar en intensidad o en cargas para que tu cuerpo no se acostumbre y siga mejorando. Si cuando llegas a entrenar estás con un nivel de energía bajo… ¿vas a poder subir esa intensidad?
Al aumentar la dificultad de los ejercicios y llevar a nuestro cuerpo al límite uno de los efectos secundarios que podemos experimentar son las archiconocidas agujetas. Estas agujetas son en realidad microrroturas fibrilares (sí, por eso duelen). Cuando descansamos, permitimos que nuestro cuerpo se regenere y que el límite de esfuerzo esté cada vez más alto.